Y tras la tensa charla con Gerardo, Alfredo camina hacia la fiscalia pensativo y cabizbajo... Aun le retumbaba en la cabeza aquella horrible frase... "Un juicio es la guerra y perder es la muerte" Podia comprender muchas cosas, pero no que la conciencia de su amigo estuviese anulada, anestesiada casi inerte. Alfredo aun no habia calibrado lo peligroso que era el ser al que se iban a enfrentar, no era facil... Era un ser detestable y siniestro disfrazado de empresario modelo. Lo peor no era eso... Lo peor es que le creian.. Y eso era lo que en la fiscalia ponia a prueba los nervios ya muy destrozados de Mara Caballero.
Sabia que Gerardo se la estaba jugando que su vida estaba en juego, que no habia salidas, que Gerardo mas que por liberar a Alejandro luchaba por conservar su integridad fisica intacta y comprendia hasta cierto punto la cabezoneria de su amigo... Pero de ahi a dejar de razonar habia un trecho importante. Alfredo no sabia como decirselo a Mara y es en.ese momento en.el que es consciente de lo que le pasa a Gerardo... De pronto algo distrae a Alfredo... A lo lejos descubre una sonrisa que le estremece, una mirada que le intimida y unos ojos que le dejan sin palabras... Sus miradas se cruzan, se sonrien y se pierden entre la gente...
Mientras Mara se encontraba escondida bajo una pila de expedientes cuando encuentra algo... Algo que le recuerda a su pasado... Ese pasado que creia muerto y enterrado acaba de resurgir y esta mas vivo que nunca...
No existen limites
sábado, 19 de enero de 2013
Desenterrando el mas letal de los recuerdos
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